27.11.08

triste presentimiento de lo que ha de acontecer

Este grabado que mide 17,8 por 22 centímetros perteneciente a la serie "retratatos de la guerra" en la que Goya utiliza la técnica de aguafuerte, buril, punta seca y bruñidor.
Como presagio de si mismo, sufrió la siguiente transfiguración durante su exposición en la Fundación Alzate Avendaño en la Ciudad de Bogotá, Colombia en septiembre de 2008: desaparece al ser "desatornillado de la pared" y es hallado al mes de su desaparición, "bajo las mantas de una habitación de un céntrico hotel bogotano".
Este presagio pesaroso que grabó su autor ¿será acaso el responsable de que los ladrones la eligieran entre las otras 79 obras restantes?
¿será que este triste presentimiento actúa como una concatenación inexorable de malos augurios?. Basta con pensar en el susto y la preocupación de los responsables de la exposición, de los encargados de la seguridad, de los ladrones, de quienes lo encontraron y de quienes lo vigilan actualmente.
Lo que ha de acontecer así será.

Sin perder la vigencia de los siglos, la guerra se repite en cada rincón que habitamos.